Eficiente herramienta de marketing
La marca del supermercado es percibida por los consumidores como sostenible y respetuosa con el medioambiente por tener instaladas placas solares.
Eficiente herramienta de marketing
La marca del supermercado es percibida por los consumidores como sostenible y respetuosa con el medioambiente por tener instaladas placas solares.
50-60% de ahorro energético
El autoconsumo de un supermercado mediante energía solar puede conseguir un ahorro de hasta un 50-60% en la factura de la luz.
Rápida amortización y larga vida útil
La instalación se amortiza entre los 3 y los 7 años, y los paneles solares seguirán produciendo energía durante los 25 años siguientes de vida útil.
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Los inmuebles que acogen en su interior supermercados, habitualmente presentan una gran superficie en donde pueden ser ubicadas las placas solares, lo que permite de forma fácil que la instalación se dimensione a la perfección y sin problemas de espacio en función de sus necesidades.
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El éxito de las instalaciones solares en los supermercados se basa en que estos desarrollan su actividad durante las horas del día y con un alto nivel de consumo energético, coincidiendo con las horas en las que los paneles producen una mayor cantidad de energía.
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La instalación de los paneles solares es muy rápida y sencilla, ya que la mayor parte de los trabajos se realizan en la cubierta o tejado del inmueble, lo que facilita que se pueda continuar con la actividad habitual durante la instalación.
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El mantenimiento de las instalaciones fotovoltaicas en un supermercado es mínimo, tan solo es necesario una vez al año comprobar que todo funciona correctamente. A su vez, la mayor parte de sus componentes ofrecen garantías que alcanzan hasta los 25-30 años.
Instalar placas solares en un supermercado produce un efecto inmediato de ahorro económico y energético. A nivel económico, el ahorro se sitúa entre un 40 y un 60% de la factura de la luz, en función de la ubicación geográfica, del clima y de la calidad de los paneles. A nivel energético, al disminuir los gastos de electricidad el supermercado mejora su competitividad.
Las instalaciones fotovoltaicas en supermercados se amortizan entre 3 y 7 años, dependiendo del tipo y tamaño de la instalación, así como de la calidad de la tecnología empleada y las horas de luz de la ubicación.
Para llevar a cabo instalaciones fotovoltaicas en supermercados existen una serie de ayudas procedentes de los Fondos Europeos y que son gestionadas por cada Comunidad Autónoma. Encontramos tres categorías diferentes de ayudas: al autoconsumo, para baterías y para climatización renovable. Dentro de éstas hay seis programas que determinan quién puede solicitarlas y cuáles son las cuantías destinadas a cada una de ellas. El primero, segundo y tercer programa son los que afectan directamente a la energía fotovoltaica en supermercados:
Ayudas del 15% al 45%: solicítalas pronto
La cuantía de estas ayudas a fondo perdido varía en función de si el receptor es una gran empresa, una pyme o un autónomo, percibiendo un porcentaje máximo sobre el volumen de inversión inicial. Las ayudas van desde el 15% para una gran empresa hasta el 45% para una pyme con un sistema de autoconsumo inferior a 10 kilovatios. La financiación que se otorga para las instalaciones de baterías también varía entre el 45% y el 65%.
Las ayudas pueden ser solicitadas desde el 16 de noviembre de 2021 hasta el 31 de diciembre de 2023.
Estas ayudas y bonificaciones pueden variar según comunidad autónoma.
Contratando un PPA (Power Purchase Agreement), POWEN se encargará de hacer la instalación fotovoltaica en el supermercado, y de mantenerla como nueva durante la duración del contrato.
Mientras, el supermercado disfrutará de la energía producida por la planta, pagando una cuota mensual fija hasta que termine el contrato (duración media: 10 años). Desde ese momento, el coste energético se reducirá radicalmente y el cliente disfrutará de energía prácticamente gratuita. De esta manera, el supermercado se protege de la volatilidad de los precios del mercado y evita una gran inversión inicial.
Para dimensionar una instalación fotovoltaica en un supermercado, es decir, para saber el número de placas solares que necesitará para su abastecimiento energético, lo primero que debemos tener en cuenta es el tamaño del supermercado. De esta forma podremos obtener la máxima rentabilidad y minimizar el periodo de amortización.
Al dimensionar una instalación de autoconsumo en un supermercado hay que tener en cuenta los siguientes factores:
La normativa que regula las instalaciones de autoconsumo de energía eléctrica en los supermercados es el Real Decreto 244/2019, de 5 de abril, por el que se establece que serán consideradas instalaciones de producción, aquellas instalaciones con una potencia inferior a 100KW.
Revisado el 15 de junio de 2022
Puede haber supermercados con instalaciones para autoconsumo con o sin excedentes. Los supermercados operan en horario diurno y si se diera el caso podrán volcar los excedentes en la red eléctrica, recibiendo una compensación por ello en el recibo de la luz al precio establecido.
Se produce un aprovechamiento fotovoltaico del 76%. El ahorro anual en la factura de la luz es del 28%, lo que equivale a 3.871€ el primer año y 135.219€ a los 25 años.
Se produce un aprovechamiento fotovoltaico del 50%. El ahorro anual en la factura de la luz es del 76%, lo que equivale a 110.702€ el primer año y 4.992.942€ a los 25 años.
Se produce un aprovechamiento fotovoltaico del 83% y el ahorro anual en la factura de la luz es del 11%, lo que equivale a 8.528€ el primer año y 241.947€ a los 25 años.
Consulta todos los detalles sobre las ayudas y subvenciones expuestas en esta página.
Una instalación fotovoltaica no cuenta apenas con partes móviles, de forma que su mantenimiento es prácticamente nulo y tan solo hay que efectuar las revisiones establecidas por ley. La mayor parte de fabricantes incluyen en sus soluciones sistemas de monitorización que informan de cuando se produce alguna incidencia y pueden localizarla para que la empresa instaladora pueda solucionarla con la mayor brevedad.
El almacenamiento no puede estar directamente conectado a la red, sino que tiene que ser parte de la instalación de autoconsumo. Además, no se puede superar el ratio de capacidad de almacenamiento frente a una potencia de generación de 2kWh/kW. Las tecnologías plomo-ácido no serán elegibles. También son subvencionables aquellas instalaciones que estén aisladas de la red eléctrica.