Los coches eléctricos o híbridos son en la actualidad un alternativa a los vehículos de motor de combustión disponible como recurso para lograr la transición energética. Con ellos es posible tener una autonomía de cientos de kilómetros gracias a los puntos de recarga repartidos por España. Y como los hay varios tipos, en este artículo nos centramos en la siguiente pregunta: ¿qué son y cómo funcionan los supercargadores de vehículos eléctricos?
Estos supercargadores para vehículos enchufables son los que permiten una velocidad de recarga súper-rápida de estos tipos de vehículos: en unos 30 minutos se recarga hasta el 80% de las baterías. Y probablemente has oído hablar de los supercargadores de Tesla, la compañía de Elon Musk, entre otros.
Por este motivo, en POWEN, como expertos en energía fotovoltaica y soluciones de recarga, queremos hablarte de estos cargadores de coches eléctricos, de sus características y su expansión en los puntos de recarga que hay en España. Y ten en cuenta, lo primero de todo, que los supercargadores no abundan ni son los más comunes en nuestro país.
Además, como vamos a explicar de forma más detallada después, debido a la potencia en kilowatios (kW) necesaria para que funcionen los supercargadores, no son habituales ni aconsejables para tener en casas.
Tiempos de recarga de coches eléctricos
En primer lugar, estos no son los únicos tipos de cargadores de coches eléctricos que hay. A continuación, resumimos cuáles puedes encontrar y usar, así como cuánto tiempo de tarda en cargar un vehículo eléctrico con cada uno de ellos.
Carga lenta: se tarda más de 5 horas
La carga lenta supone más de 5 horas cargando el vehículo eléctrico: con una potencia de 3,7 kW el coche se carga en 8 horas, aunque a una potencia de 7,4 kW se puede bajar a 4 horas. Esta velocidad de carga es posible por el uso de sistemas monofásicos.
Carga semi-rápida: entre 1 y 3 horas
La carga semi-rápida permite cargar un coche eléctrico en un periodo de tiempo que oscila de 1 a 3 horas. Este tipo de carga se puede llevar a cabo en electrolineras (gasolineras que disponen de puntos de recarga) y en puntos domésticos. La potencia oscila de los 11 kW a los 22 kW.
Carga rápida: 30 minutos
Con una potencia de 50 kW (utilitarios) a 350 kW (para vehículos industriales pesados), la carga rápida permite recargar las baterías en tan solo 30 minutos o menos. Los puntos de recarga que lo permiten están en estaciones de recarga con los cargadores específicos para una potencia tan alta, los súpercargadores de coches eléctricos.
Carga ultra rápida: máximo de 10 minutos
Y en cuarto lugar, hay puntos de recarga que con una potencia de 150 kw – 400 kW, que alcanzan los 735 Amperios y permiten una carga ultra rápida, en un máximo de 10 minutos. El primero se instaló en la localidad de Lopidana (Álava) en abril del año 2019.
Los supercargadores de coches eléctricos
Los supercargadores de coches eléctricos, que son los que tienen los puntos de recarga en poste (pole) cargan las baterías del vehículo en aproximadamente 30 minutos, como hemos comentado previamente. ¿Dónde están situados? Lo habitual es que los tengan empresas (aquí puedes ver nuestros servicios para autoconsumo en empresas), electrolineras y también las Administraciones Públicas.
Sin embargo, los supercargadores no están nada extendidos en España, si atendemos a los datos del ‘Mapa de despliegue de infraestructuras de Recarga de Acceso Público en España’ de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC) y Faconauto.
Este informe señala que de los más de 11.000 puntos de recarga de coches eléctricos que hay en España, el 83% son de carga lenta, con una potencia igual o inferior a los 22 kW. Y del 17% restante no se puede decir que todos sean supercargadores, sino que se reparten entre los cargadores de carga semi-rápida, rápida o ultra rápida.
Por lo tanto, lo más habitual para cargar un coche eléctrico es usar cargadores compatibles con la potencia recomendada en una vivienda (entre 3,5 kW y 6,9 kW). Es decir, una velocidad lenta de recarga. Es decir, una potencia muy alejada de los 50 kW necesarios para utilitarios o de los 350 kW para vehículos industriales pesados, mencionados antes.
Para una velocidad semi-rápida lo mejor es acudir a una electrolinera o cargar el coche en los puntos de recarga que haya en las empresas o parkings, por ejemplo, si tienen contratada una potencia suficiente.
Funcionamiento de los supercargadores de vehículos enchufables
En cuanto al funcionamiento de los supercargadores de coches eléctricos o híbridos, es el mismo que el resto con la diferencia de la velocidad y la necesidad de unos conectores que permitan niveles tan altos de potencia de corriente alterna que se convierte en corriente continua, la que admiten las baterías eléctricas de los coches enchufables. Esta transformación la lleva a cabo el convertidor de potencia.
Para usar los supercargadores hay que conectar el vehículo con el punto de recarga por medio del conector, igual que en una gasolineras se conecta el depósito por medio de la manguera. Una vez conectado, solo hay que esperar a que las baterías se carguen con la electricidad procedente de la red eléctrica a la que está conectado el punto de recarga.
Así pues, a pesar de que obviamente una carga rápida o ultra rápida de coches eléctricos ofrece muchas ventajas, lo cierto es que tanto para viviendas como para empresas sean más habituales los puntos de recarga lenta o semi rápida.
Y también por este motivo, la expansión de los puntos de recarga en España seguramente llevará aparejado un mayor número de puntos para recargas semirápidas y, siempre en menor medida, para rápidas o ultra rápidas con supercargadores de vehículos eléctricos. Dirigidos a conductores de vehículos de transporte de mercancías que tenga una flota eléctrica, por ejemplo, que no pueden estar muchas horas esperando a que se cargue.